Quemador de incienso chino de bronce de la dinastía Qing, datado en el siglo XVIII, probablemente de la época del emperador Qianlong, quien gobernó China entre 1736 y 1795. Representa a un Fu, cuya figura se asemeja a la de un león alado. Es un animal mitológico considerado un poderoso protector por los practicantes del Feng Shui, un híbrido entre un animal marino y uno terrestre, y también relacionado con la riqueza debido a su voraz apetito por el oro y la plata.
